martes, 31 de marzo de 2009

Para autoregalarme


Webeando descubrí un muy buen libro del que vagamente recuerdo haber oído hablar... al leer algunos fragmentos, me quedé con ganas de leerlo totalmente. Por eso, en un futuro planeo autoregalármelo, ya que mi marido es reacio a los libros, y si espero eso de su parte... Se llama "Guía (Inútil) Para Madres Primerizas" y probablemente todas lo conozcan.

He aquí unos fragmentos de su introducción:

Ya está. Ya nació. Y, como esto es lo más importante que te pasó en la vida, tenés que ser feliz. ¿Qué pasa?¿Te duelen los puntos y no te podés sentar porque te salió una sandía de adentro hace 24 horas? ¿Te molesta el tajo que te hicieron en la panza y te duele cuando sonreís? ¿Estás sentada en un aro de goma que parece el asiento del inodoro? ¿Tenés las tetas como dos rocas impenetrables y te subió la fiebre a 39 y medio? ¿O tenés los pezones lastimados y cada vez que la pequeña novedad succiona te querés morir? ¿Te sentís horrible?¿Se te cae el pelo y estás gorda como un cerdo?¿Llevás un día entero sin dormir? ¿Te sentís un fenómeno de circo?

No importa, querida, fuiste madre y tenés que ser feliz. No importa que no le importes a nadie. No importa que la gente pase por delante tuyo y ni te pregunte cómo estás. Ni que no te puedas sentar y a nadie se le ocurra ofrecerte un mísero almohadón. Ni que tengas hambre y no haya nada para comer excepto dos docenas de bolas de fraile. Ni que mueras de sed y no te alcancen ni un vasito de agua. Ni que tu casa esté invadida de gente que habla a los gritos y que supuestamente viene a ayudar pero en verdad espera que le cebes mate. No importa que hasta hace un día todo el mundo estaba pendiente de vos y ahora no existís. No importa todo eso. Tenés que ser feliz.

En las últimas 24 horas cambiaron algunas cositas en tu vida, cambios que podrías tratar de procesar si no fuera por el ruido ambiente, el hormonazo y las molestias posparto. Finalmente, y aunque no lo parezca ahora, la felicidad era esto. Esto. Y vos te sentís sorprendida en tu buena fe, porque cuando te dieron manija con el embarazo nadie te dijo que esto —lo que venía después— era así.

Hay cuestiones fundamentales que por resentimiento, amnesia temporaria o necesidad de preservación de la especie nadie te cuenta. Ni tu mamá, ni tu mejor amiga que tuvo un niño antes que vos, ni los autores de libros de éxito. Todas esas cosas ahora se resumen en la palabra “esto”. Digamos tres verdades acerca de Esto:

Verdad N° 1: Nadie te lo cuenta como realmente es. Por piedad o sadismo, te lo ocultan. Esta guía contiene esa lista de cosas que nadie te dice sobre la maternidad. Por eso es imprescindible. Las que ya tuvieron hijos leerán esto y dirán “bué, qué novedad”. Pero para las primerizas, que es a quienes está dirigido este libro, es una revelación.

Verdad N° 2: Saber todas esas cosas que nadie te había dicho sobre la maternidad no sirve para nada. En eso reside la inutilidad de esta guía. ¿Para qué sirven libros como éste, entonces? Bueno, los libros sobre maternidad, en general, son una buena base de datos y argumentos que pueden ayudarte a sostener decisiones que de todos modos habrías tomado. Nadie puede enseñarte nada sobre tu propio hijo. ¿Para qué engañarte? Los niños no se crían solos, pero casi.

Miren, si no, a Rómulo y Remo. El problema de dejarlos en la puerta de Casa Cuna y salir corriendo —no digas que no se te ocurre— no es que no van a sobrevivir, sino que una no podría tolerarlo. Así que a esta altura, en la que no se aceptan cambios ni devoluciones, vas a tener que encontrarle la vuelta a la situación. Y en eso estás sola como un perro sin paseador.

Lo que sí podemos ofrecerte es el alivio que te aporta conocer la verdad. Y también soluciones para uno de los grandes problemas de la crianza de un bebé: cómo mantener a raya a los demás.

La obligación de que el niño sobreviva a la familia, el país y el mundo globalizado (todo libro serio debe contener la palabra “globalizado”) es tuya. Al menos hasta los 18 años. Parientes, autoridades y metidos varios no harán mucho al respecto, además de criticar.

Verdad N° 3: Parte del secreto de una crianza exitosa es encontrar el modo de que los demás no te jodan —y si es posible, que ayuden— mientras vos hacés el laburo. Si podemos ayudarte en eso, amiga.


Me sentí bastante identificada con muchas cosas que dicen. Tomarse con humor la maternidad me parece sano y ameniza un poco más el trajín diario.

Después de todo, ¿quien podría decir que no se sintió asi cuando tuvo a su primer bebé? Ninguna nació sabiendo, todas nos sentimos entre perdidas, agotadas y atiborradas de sentimientos...

espero poder conseguirlo!!

domingo, 29 de marzo de 2009

Salida

El viernes salimos con mi marido a un baile, acá en mi ciudad.
Es casi nuestra única salida solos, y se da cada 4 o 5 meses, porque mi marido es fanático de la banda musical Sabroso, y esporádicamente tocan en nuestra ciudad.
Maite se durmió a las 23 hs en la cama de sus abuelos, y durmió con mi mamá toda la noche super tranqui... cuando volvimos, la pasé a su cuna, y ni se mosqueó.

Recuerdo cuando salimos por primera vez a un baile solos, ella habrá tenido 4 meses, estuve toda la noche preocupada, extrañándola, llamando a mi mamá a ver si estaba todo bien... los pechos me reventaban!! y me lo pasé mal porque estuve todo el tiempo pensando en ella en lugar de disfrutar...


Pero es absolutamente necesario. Tal vez suene mal, pero no soy de esas madres que no se pueden despegar de sus hijos, que no los dejan quedar con nadie o los mezquinan. Al contrario, desde pequeña mi hija está acostumbrada a salir con sus abuelos, a quedarse con ellos o con mis tíos o mis suegros, cuando tengo que hacer algún trámite o hacerme algún estudio.


Obviamente me preocupo y pienso en ella todo el tiempo, porque así somos las madres, por más que estemos haciendo o pensando en otra cosa, en el fondo el pensamiento siempre está centrado en nuestros hijos. Pero sé que le hace bien a ella y a mí separarnos de vez en cuando, que socialice con otras personas, que aprenda a ser independiente; y a mí, me da tiempo de ocuparme de la casa o de mí misma, de hacer cosas que no puedo hacer cuando está ella.


Y cuando vuelvo a casa, o cuando ella vuelve luego de un paseo, que corra hacia mí y me diga "hola mami!", es tan gratificante!!

sábado, 21 de marzo de 2009

Conversación

Yo: (Maite estaba mirando la foto de un bebé en un folleto) "que es eso hija?"
Maite: "un bebé"
Y: "ah, y vos sos bebé?"
M: "no, soy Matena" (y se pegaba con la mano en el pecho)

sin dudas, no tiene problemas de personalidad.

sábado, 14 de marzo de 2009

Los nuevos ídolos de Maite



"a girar, a girar" eso grita por toda la casa mientras corre y da vueltas.

"poné Jadores!!" es su reclamo.



Esta nena es una grouppie!

Los Hi-5 son historia.

martes, 10 de marzo de 2009

Diosidades


Probablemente todos hayan visto
esta noticia, la de la mujer policía (foto) que encontró a una beba recién nacida abandonada y en el trayecto al hospital, le dió de mamar.

Como dice en la nota,
"Los médicos que atendieron a la beba dijeron que ese gesto de la mujer policía le salvó la vida a la beba".

Yo me pregunto ¿qué hubiera pasado si la mujer no hubiera estado amamantando? O si la beba hubiera sido encontrada por un hombre, o por cualquier otra mujer policía que no estuviera lactando... ¿Casualidad?


La madre de esa beba obviamente no la quiso, pero Alguien arriba tenía otros planes...
Como decía el querido Víctor Sueiro, "a mi me gusta llamar Diosidades a estas cosas"

lunes, 9 de marzo de 2009

Fiesta de la Mujer

El sábado en la plaza de la ciudad se hizo una fiesta para festejar (valga la redundancia) el Día de la Mujer. Lo organizó el Consejo Provincial de la Mujer, junto con otras entidades como Cáritas y Cruz Roja.
La entrada era un útil escolar a voluntad, y fuimos con mi mamá y mi hijita. En ella actuaron var
ios cantantes locales, estudios de danzas y hubo sorteos de muchos premios. La atracción principal, y creo que la razón por la cual hubo más de 4.000 personas, era la actuación del ganador de "Talento Argentino", el humorista Martín Bustos, quien es nativo de esta ciudad.

A mi me encanta este chico (tiene mi edad, no tan chico, jaja), desde que lo vi actuar en la tele, siempre hicimos fuerza y lo votamos para que ganara. Toda la ciudad lo quiere muchísimo; cuando volvió luego de ganar el concurso, hubo una gran caravana para recibirlo, y él desfiló por todo el pueblo subido a un camión de los bomberos.


Por suerte, parece que la fama no se le subió a la cabeza: al final del show, salió a saludar y sacarse fotos con todos, muy simpático y humilde.
Acá les dejo algunas fotos de su actuación, incluso me saqué una con él! quise sacarle con Maitena y no hubo caso, no quiso quedarse!



Imitando a Chayanne, genial!


El pastor Quemao, su personaje principal.

domingo, 8 de marzo de 2009

8 DE MARZO

LES DESEO DE TODO CORAZÓN un maravilloso día!!!
para mis amigas blogueras, mis amigas foreras, mis amigas de la vida,mi mami, mis tías, mis 2 abuelas, mis primas, y la mujercita más maravillosa e importante de mi vida: MI HIJITA!!

viernes, 6 de marzo de 2009

Malvenida

Ayer recibí una visita que hacía meses no tenía. Es la vieja amiga de todas las mujeres, esa que viene una vez por mes y se queda 4 o 5 días, tan molesta cuando llega y tanto que preocupa a algunas cuando tarda en venir. Lo que pasa es que como estuve tomando anticonceptivos por tratamiento médico, esto detenía a la "amiga molesta" y no me visitó por muchos meses.
Ya me había acostumbrado a que no viniera, estaba pancha y tranquila, sin hinchazones, dolores ni gastos en toallas femeninas.
Pero el mes pasado dejé las pastillas, porque si bien no quiero tener otro hijo por ahora, me hacían doler la cabeza, y ni hablar de como me afectaban el humor.
Así que estoy de nuevo en el mundo "rojo furioso", y confieso que no lo extrañaba para nada, tengo la panza hecha un bombo y volví al Ibuevanol...
Otra de las lindas cosas de ser mujer...

domingo, 1 de marzo de 2009

Litotomía

Hoy tuve un acontecimiento feliz, mi amiga Fabiana dio a luz a su segunda hija, una preciosa beba de 3.750 kg llamada Malena. Ambas estaban radiantes, ella muy cansada por el parto pero muy bien gracias a Dios. Me mostró las fotos que sacó su marido, muy intensas, bromeábamos sobre que estaba "enhorquetada" pero no le daba vergüenza y se las mostraba a todos los que iban llegando. Lo que me llamó la atención, fue ver en la foto que, al igual que a mí, le ataron las piernas en la sala de parto. Esa posición, acostada y con las piernas atadas, se llama "litotomía", y se está volviendo cada vez más popular. Como no puedo con mi genio de pugnar por los derechos de las parturientas, googlée ese término para ver que decían al respecto. Y acá está.

Litotomía en el parto: una práctica cuestionable.
Dr. Carlos Burgo, Obstetra

"Si tenemos que resumir la historia de la obstetricia en algunos pocos hitos hemos de resaltar por un lado la aparición de los instrumentos que se usan en la atención y por otro destacar el cambio de posición que le fue impuesto a la mujer en los albores de la obstetricia científica.

La utilización de esta práctica es un elemento paradigmático de un modelo de atención, que desvía su mirada hacia la consagración de la mujer como "objeto" del trabajo médico. Es la posición de litotomía impuesta la que define todo el carácter del vínculo asistencial: una mujer acostada en decúbito dorsal con sus muslos y piernas flexionados y sostenidos por encima de ella, atados, y declarando su inmovilidad.

La aparición en la escena del parto de un nuevo representante social, el médico, en la habitación y en la intimidad, portando en sus manos los primeros instrumentos y con un naciente discurso científico y deshumanizante, desplaza a la comadrona y al padre.

Al imponer la posición acostada, el médico diseña la facilitación de su tarea. Puede dar órdenes que serán obedecidas. Pierde importancia el mundo afectivo de la mujer. Ya no está ella buscando distintas posiciones según sus necesidades, no puede hacerse sostener por una amiga, por su pareja, alentada y protegida. Acostada, expuesta y vulnerable, ya no será el médico quien se inclina a sus pies para recibir al niño.

La inmensa mayoría de los obstetras insisten hoy en día en la imposición de la litotomía como posición excluyente de la madre para parir, sin ninguna reflexión sobre lo que vive y siente cada mujer, y obligando al niño por nacer, en el recorrido por el canal del parto y su curvatura, que nazca hacia arriba. Como se asevera en numerosos libros de la especialidad y muchos obstetras sostienen en su práctica diaria, la litotomía es la posición más satisfactoria, la mejor, porque la mujer acostada con sus piernas colgadas está en la posición ideal que favorece, para quien la atiende, resolver cualquier complicación, efectuar (por rutina) intervenciones obstétricas (monitoreo fetal continuo) y conservar pautas de esterilidad.

¿Pero quién considera la situación de la mujer? ¿Se le pregunta si es mejor y más satisfactoria para ella?

La biología no ha previsto que la mujer durante su trabajo de parto permanezca acostada. Puede moverse y cambiar de posición las veces que lo necesite y quiera. Esta movilidad de ninguna manera compromete el bienestar fetal. Esta es la condición de la inmensa mayoría de las mujeres, que usando los códigos médicos, se encuentran en situación de bajo riesgo.

La posición acostada de espaldas es la peor posición que pueda concebirse para el trabajo de parto y el parto. Entre los problemas enumerados desde el punto de vista fisiológico se destacan los siguientes:

  1. la compresión de los gruesos vasos sanguíneos dorsales interfiere con la circulación y disminuye la presión sanguínea con la consiguiente disminución de la oxigenación fetal, La actividad contráctil uterina tiende a ser más débil y menos frecuente, y la necesidad de pujar se torna más dificultosa debido al esfuerzo mayor al no estar favorecida por la fuerza de la gravedad. El descenso más lento incrementa el uso del fórceps.
  2. El coccix es comprimido contra la cama de parto, que lo fuerza hacia delante estrechando la salida pélvica, con la mayor dificultad y alargamiento de la expulsión.
  3. La compresión nerviosa, por la presión ejercida sobre las piernas colgadas en los estribos.
  4. La ausencia de una efectiva y sostenida presión por parte de la cabeza fetal sobre el periné, no permite una eficaz y pausada distensión del mismo, con la consecuencia de una necesidad compulsiva de realizar una episiotomía que sería innecesaria.
  5. El carácter de procedimiento de intervención de la posición de litotomía se completa con anestesias peridurales e infusiones de oxitocina rutinarias que agregan dificultades inherentes a esos procedimientos.
Sobre este parámetro de la medicalización se sostienen y afirman otros dos aspectos que caracterizan y ponen valla a la catarata emocional que irrumpe continuamente, uno de ellos es la despersonalización de la parturienta transformada en un "objeto de trabajo", un "campo de trabajo", rendida en su condición de "paciente", acostada inmóvil y obediente a las prescripciones del "personal". En esta condición se somete al "torrente animal" de movimientos y sonidos que pulsan internamente por encontrar cauce en su cuerpo "amordazado". La experiencia de desintegración y pérdida de control resulta intolerable e inmanejable. Un cuerpo-objeto despersonalizado es dócil a la exigencia médica.

La culminación de esta escena encuentra a la mujer pariendo acostada en una cama de partos, dentro de un ámbito de sala operatoria, con las piernas alzadas, flexionadas y sostenidas firmemente abiertas en unos estribos diseñados al efecto. El sexo rasurado, puesto en primer plano frente a los presentes y bien iluminado, frecuentemente rodeada por los cinturones del monitor fetal y la vía de la venoclisis sistemáticamente colocada. La inmovilidad es completa, el acceso a su cuerpo es total, hallándose a disposición para la inspección e intervención continua de los asistentes. Se incrementa la vulnerabiblidad por el fantasma de lo que el otro puede hacer con su cuerpo ya vulnerable.

Esta posición de dependencia que la compulsa a estar en manos de los otros tiene un enorme significado simbólico. Acostada, no alcanza con su mirada a sus genitales y la imposibilidad de movimiento la inhibe de estar conectada con sus impulsos y sensaciones físicas y emocionales. El esfuerzo de parir es una actividad humana que requiere un empeño subjetivo y una necesidad de contacto de los pies con la tierra.

Ella acostada, con los otros de pie frente a ella , está en una posición considerada "más cómoda" para la intervención pero que tiene un claro significado de poder, así, es silenciada la voz de la mujer para elegir la posición de parir.

Un intento de responder a evidencias científicas ha sido el desarrollo de los sillones de parto electrónicos, que con desigual fortuna han circulado por muchas salas de parto pero sin la correspondiente creencia en sus valores y beneficios. Pero debemos advertir que este diseño se transforma eventualmente en un instrumento más que intenta reemplazar el más valioso instrumento para parir que tiene una mujer: su propio cuerpo. En estas sillas de alta tecnología, a la mujer se le priva de la libertad de salir de su posición las veces que desee entre las contracciones y sus parejas se distancian del contacto íntimo necesario. A pesar de las ventajas fisiológicas que ofrece sobre la cama de partos y la litotomía, sigue constituyendo un obstáculo para las mujeres que desearían tener la libertad de cambiar frecuentemente de posiciones entre contracciones, para pujar quizás sentada, arrodillada o en cuclillas, en el piso o en el agua."

Carlos Burgo, Médico obstetra y ginecólogo, autor de Parir con pasión (editado en Argentina)

Miembro Titular de la Asociación Argentina de Ginecología y Obstetricia Psicosomática (AAGOP). Miembro Titular de la Asociación Argentina de Perinatología (ASAPER), Premio de la Fundación E. Koremblit: Retorno al parto natural, 1990, Buenos Aires, Argentina.


Me siento tan identificada con lo que expone el doctor Burgo! así me sentí yo en mi parto, un objeto, una cosa a la que tiraron encima de una cama de parto y ataron para hacer de ella lo que querían, sin voz ni voto. Despersonalizada. No hay palabra que lo defina mejor.

A mis lectoras y amigas, pido perdón si canso con este tema, pero es algo que me cuesta superar, el haber sido maltratada en el momento más maravilloso de mi vida, el nacimiento de mi hija, es algo que no puedo olvidar. No hay nada que hacer, como me dijeron desde una ONG a la que consulté, "ya pasó y no hay nada que puedas hacer". Lo que sí puedo hacer es ayudar a que a ninguna mujer le suceda lo mismo. Y si leyendo lo que escribo desde este humilde espacio, ayudo aunque sea a una sola chica, me sentiría mejor.


martes, 31 de marzo de 2009

Para autoregalarme


Webeando descubrí un muy buen libro del que vagamente recuerdo haber oído hablar... al leer algunos fragmentos, me quedé con ganas de leerlo totalmente. Por eso, en un futuro planeo autoregalármelo, ya que mi marido es reacio a los libros, y si espero eso de su parte... Se llama "Guía (Inútil) Para Madres Primerizas" y probablemente todas lo conozcan.

He aquí unos fragmentos de su introducción:

Ya está. Ya nació. Y, como esto es lo más importante que te pasó en la vida, tenés que ser feliz. ¿Qué pasa?¿Te duelen los puntos y no te podés sentar porque te salió una sandía de adentro hace 24 horas? ¿Te molesta el tajo que te hicieron en la panza y te duele cuando sonreís? ¿Estás sentada en un aro de goma que parece el asiento del inodoro? ¿Tenés las tetas como dos rocas impenetrables y te subió la fiebre a 39 y medio? ¿O tenés los pezones lastimados y cada vez que la pequeña novedad succiona te querés morir? ¿Te sentís horrible?¿Se te cae el pelo y estás gorda como un cerdo?¿Llevás un día entero sin dormir? ¿Te sentís un fenómeno de circo?

No importa, querida, fuiste madre y tenés que ser feliz. No importa que no le importes a nadie. No importa que la gente pase por delante tuyo y ni te pregunte cómo estás. Ni que no te puedas sentar y a nadie se le ocurra ofrecerte un mísero almohadón. Ni que tengas hambre y no haya nada para comer excepto dos docenas de bolas de fraile. Ni que mueras de sed y no te alcancen ni un vasito de agua. Ni que tu casa esté invadida de gente que habla a los gritos y que supuestamente viene a ayudar pero en verdad espera que le cebes mate. No importa que hasta hace un día todo el mundo estaba pendiente de vos y ahora no existís. No importa todo eso. Tenés que ser feliz.

En las últimas 24 horas cambiaron algunas cositas en tu vida, cambios que podrías tratar de procesar si no fuera por el ruido ambiente, el hormonazo y las molestias posparto. Finalmente, y aunque no lo parezca ahora, la felicidad era esto. Esto. Y vos te sentís sorprendida en tu buena fe, porque cuando te dieron manija con el embarazo nadie te dijo que esto —lo que venía después— era así.

Hay cuestiones fundamentales que por resentimiento, amnesia temporaria o necesidad de preservación de la especie nadie te cuenta. Ni tu mamá, ni tu mejor amiga que tuvo un niño antes que vos, ni los autores de libros de éxito. Todas esas cosas ahora se resumen en la palabra “esto”. Digamos tres verdades acerca de Esto:

Verdad N° 1: Nadie te lo cuenta como realmente es. Por piedad o sadismo, te lo ocultan. Esta guía contiene esa lista de cosas que nadie te dice sobre la maternidad. Por eso es imprescindible. Las que ya tuvieron hijos leerán esto y dirán “bué, qué novedad”. Pero para las primerizas, que es a quienes está dirigido este libro, es una revelación.

Verdad N° 2: Saber todas esas cosas que nadie te había dicho sobre la maternidad no sirve para nada. En eso reside la inutilidad de esta guía. ¿Para qué sirven libros como éste, entonces? Bueno, los libros sobre maternidad, en general, son una buena base de datos y argumentos que pueden ayudarte a sostener decisiones que de todos modos habrías tomado. Nadie puede enseñarte nada sobre tu propio hijo. ¿Para qué engañarte? Los niños no se crían solos, pero casi.

Miren, si no, a Rómulo y Remo. El problema de dejarlos en la puerta de Casa Cuna y salir corriendo —no digas que no se te ocurre— no es que no van a sobrevivir, sino que una no podría tolerarlo. Así que a esta altura, en la que no se aceptan cambios ni devoluciones, vas a tener que encontrarle la vuelta a la situación. Y en eso estás sola como un perro sin paseador.

Lo que sí podemos ofrecerte es el alivio que te aporta conocer la verdad. Y también soluciones para uno de los grandes problemas de la crianza de un bebé: cómo mantener a raya a los demás.

La obligación de que el niño sobreviva a la familia, el país y el mundo globalizado (todo libro serio debe contener la palabra “globalizado”) es tuya. Al menos hasta los 18 años. Parientes, autoridades y metidos varios no harán mucho al respecto, además de criticar.

Verdad N° 3: Parte del secreto de una crianza exitosa es encontrar el modo de que los demás no te jodan —y si es posible, que ayuden— mientras vos hacés el laburo. Si podemos ayudarte en eso, amiga.


Me sentí bastante identificada con muchas cosas que dicen. Tomarse con humor la maternidad me parece sano y ameniza un poco más el trajín diario.

Después de todo, ¿quien podría decir que no se sintió asi cuando tuvo a su primer bebé? Ninguna nació sabiendo, todas nos sentimos entre perdidas, agotadas y atiborradas de sentimientos...

espero poder conseguirlo!!

domingo, 29 de marzo de 2009

Salida

El viernes salimos con mi marido a un baile, acá en mi ciudad.
Es casi nuestra única salida solos, y se da cada 4 o 5 meses, porque mi marido es fanático de la banda musical Sabroso, y esporádicamente tocan en nuestra ciudad.
Maite se durmió a las 23 hs en la cama de sus abuelos, y durmió con mi mamá toda la noche super tranqui... cuando volvimos, la pasé a su cuna, y ni se mosqueó.

Recuerdo cuando salimos por primera vez a un baile solos, ella habrá tenido 4 meses, estuve toda la noche preocupada, extrañándola, llamando a mi mamá a ver si estaba todo bien... los pechos me reventaban!! y me lo pasé mal porque estuve todo el tiempo pensando en ella en lugar de disfrutar...


Pero es absolutamente necesario. Tal vez suene mal, pero no soy de esas madres que no se pueden despegar de sus hijos, que no los dejan quedar con nadie o los mezquinan. Al contrario, desde pequeña mi hija está acostumbrada a salir con sus abuelos, a quedarse con ellos o con mis tíos o mis suegros, cuando tengo que hacer algún trámite o hacerme algún estudio.


Obviamente me preocupo y pienso en ella todo el tiempo, porque así somos las madres, por más que estemos haciendo o pensando en otra cosa, en el fondo el pensamiento siempre está centrado en nuestros hijos. Pero sé que le hace bien a ella y a mí separarnos de vez en cuando, que socialice con otras personas, que aprenda a ser independiente; y a mí, me da tiempo de ocuparme de la casa o de mí misma, de hacer cosas que no puedo hacer cuando está ella.


Y cuando vuelvo a casa, o cuando ella vuelve luego de un paseo, que corra hacia mí y me diga "hola mami!", es tan gratificante!!

sábado, 21 de marzo de 2009

Conversación

Yo: (Maite estaba mirando la foto de un bebé en un folleto) "que es eso hija?"
Maite: "un bebé"
Y: "ah, y vos sos bebé?"
M: "no, soy Matena" (y se pegaba con la mano en el pecho)

sin dudas, no tiene problemas de personalidad.

sábado, 14 de marzo de 2009

Los nuevos ídolos de Maite



"a girar, a girar" eso grita por toda la casa mientras corre y da vueltas.

"poné Jadores!!" es su reclamo.



Esta nena es una grouppie!

Los Hi-5 son historia.

martes, 10 de marzo de 2009

Diosidades


Probablemente todos hayan visto
esta noticia, la de la mujer policía (foto) que encontró a una beba recién nacida abandonada y en el trayecto al hospital, le dió de mamar.

Como dice en la nota,
"Los médicos que atendieron a la beba dijeron que ese gesto de la mujer policía le salvó la vida a la beba".

Yo me pregunto ¿qué hubiera pasado si la mujer no hubiera estado amamantando? O si la beba hubiera sido encontrada por un hombre, o por cualquier otra mujer policía que no estuviera lactando... ¿Casualidad?


La madre de esa beba obviamente no la quiso, pero Alguien arriba tenía otros planes...
Como decía el querido Víctor Sueiro, "a mi me gusta llamar Diosidades a estas cosas"

lunes, 9 de marzo de 2009

Fiesta de la Mujer

El sábado en la plaza de la ciudad se hizo una fiesta para festejar (valga la redundancia) el Día de la Mujer. Lo organizó el Consejo Provincial de la Mujer, junto con otras entidades como Cáritas y Cruz Roja.
La entrada era un útil escolar a voluntad, y fuimos con mi mamá y mi hijita. En ella actuaron var
ios cantantes locales, estudios de danzas y hubo sorteos de muchos premios. La atracción principal, y creo que la razón por la cual hubo más de 4.000 personas, era la actuación del ganador de "Talento Argentino", el humorista Martín Bustos, quien es nativo de esta ciudad.

A mi me encanta este chico (tiene mi edad, no tan chico, jaja), desde que lo vi actuar en la tele, siempre hicimos fuerza y lo votamos para que ganara. Toda la ciudad lo quiere muchísimo; cuando volvió luego de ganar el concurso, hubo una gran caravana para recibirlo, y él desfiló por todo el pueblo subido a un camión de los bomberos.


Por suerte, parece que la fama no se le subió a la cabeza: al final del show, salió a saludar y sacarse fotos con todos, muy simpático y humilde.
Acá les dejo algunas fotos de su actuación, incluso me saqué una con él! quise sacarle con Maitena y no hubo caso, no quiso quedarse!



Imitando a Chayanne, genial!


El pastor Quemao, su personaje principal.

domingo, 8 de marzo de 2009

8 DE MARZO

LES DESEO DE TODO CORAZÓN un maravilloso día!!!
para mis amigas blogueras, mis amigas foreras, mis amigas de la vida,mi mami, mis tías, mis 2 abuelas, mis primas, y la mujercita más maravillosa e importante de mi vida: MI HIJITA!!

viernes, 6 de marzo de 2009

Malvenida

Ayer recibí una visita que hacía meses no tenía. Es la vieja amiga de todas las mujeres, esa que viene una vez por mes y se queda 4 o 5 días, tan molesta cuando llega y tanto que preocupa a algunas cuando tarda en venir. Lo que pasa es que como estuve tomando anticonceptivos por tratamiento médico, esto detenía a la "amiga molesta" y no me visitó por muchos meses.
Ya me había acostumbrado a que no viniera, estaba pancha y tranquila, sin hinchazones, dolores ni gastos en toallas femeninas.
Pero el mes pasado dejé las pastillas, porque si bien no quiero tener otro hijo por ahora, me hacían doler la cabeza, y ni hablar de como me afectaban el humor.
Así que estoy de nuevo en el mundo "rojo furioso", y confieso que no lo extrañaba para nada, tengo la panza hecha un bombo y volví al Ibuevanol...
Otra de las lindas cosas de ser mujer...

domingo, 1 de marzo de 2009

Litotomía

Hoy tuve un acontecimiento feliz, mi amiga Fabiana dio a luz a su segunda hija, una preciosa beba de 3.750 kg llamada Malena. Ambas estaban radiantes, ella muy cansada por el parto pero muy bien gracias a Dios. Me mostró las fotos que sacó su marido, muy intensas, bromeábamos sobre que estaba "enhorquetada" pero no le daba vergüenza y se las mostraba a todos los que iban llegando. Lo que me llamó la atención, fue ver en la foto que, al igual que a mí, le ataron las piernas en la sala de parto. Esa posición, acostada y con las piernas atadas, se llama "litotomía", y se está volviendo cada vez más popular. Como no puedo con mi genio de pugnar por los derechos de las parturientas, googlée ese término para ver que decían al respecto. Y acá está.

Litotomía en el parto: una práctica cuestionable.
Dr. Carlos Burgo, Obstetra

"Si tenemos que resumir la historia de la obstetricia en algunos pocos hitos hemos de resaltar por un lado la aparición de los instrumentos que se usan en la atención y por otro destacar el cambio de posición que le fue impuesto a la mujer en los albores de la obstetricia científica.

La utilización de esta práctica es un elemento paradigmático de un modelo de atención, que desvía su mirada hacia la consagración de la mujer como "objeto" del trabajo médico. Es la posición de litotomía impuesta la que define todo el carácter del vínculo asistencial: una mujer acostada en decúbito dorsal con sus muslos y piernas flexionados y sostenidos por encima de ella, atados, y declarando su inmovilidad.

La aparición en la escena del parto de un nuevo representante social, el médico, en la habitación y en la intimidad, portando en sus manos los primeros instrumentos y con un naciente discurso científico y deshumanizante, desplaza a la comadrona y al padre.

Al imponer la posición acostada, el médico diseña la facilitación de su tarea. Puede dar órdenes que serán obedecidas. Pierde importancia el mundo afectivo de la mujer. Ya no está ella buscando distintas posiciones según sus necesidades, no puede hacerse sostener por una amiga, por su pareja, alentada y protegida. Acostada, expuesta y vulnerable, ya no será el médico quien se inclina a sus pies para recibir al niño.

La inmensa mayoría de los obstetras insisten hoy en día en la imposición de la litotomía como posición excluyente de la madre para parir, sin ninguna reflexión sobre lo que vive y siente cada mujer, y obligando al niño por nacer, en el recorrido por el canal del parto y su curvatura, que nazca hacia arriba. Como se asevera en numerosos libros de la especialidad y muchos obstetras sostienen en su práctica diaria, la litotomía es la posición más satisfactoria, la mejor, porque la mujer acostada con sus piernas colgadas está en la posición ideal que favorece, para quien la atiende, resolver cualquier complicación, efectuar (por rutina) intervenciones obstétricas (monitoreo fetal continuo) y conservar pautas de esterilidad.

¿Pero quién considera la situación de la mujer? ¿Se le pregunta si es mejor y más satisfactoria para ella?

La biología no ha previsto que la mujer durante su trabajo de parto permanezca acostada. Puede moverse y cambiar de posición las veces que lo necesite y quiera. Esta movilidad de ninguna manera compromete el bienestar fetal. Esta es la condición de la inmensa mayoría de las mujeres, que usando los códigos médicos, se encuentran en situación de bajo riesgo.

La posición acostada de espaldas es la peor posición que pueda concebirse para el trabajo de parto y el parto. Entre los problemas enumerados desde el punto de vista fisiológico se destacan los siguientes:

  1. la compresión de los gruesos vasos sanguíneos dorsales interfiere con la circulación y disminuye la presión sanguínea con la consiguiente disminución de la oxigenación fetal, La actividad contráctil uterina tiende a ser más débil y menos frecuente, y la necesidad de pujar se torna más dificultosa debido al esfuerzo mayor al no estar favorecida por la fuerza de la gravedad. El descenso más lento incrementa el uso del fórceps.
  2. El coccix es comprimido contra la cama de parto, que lo fuerza hacia delante estrechando la salida pélvica, con la mayor dificultad y alargamiento de la expulsión.
  3. La compresión nerviosa, por la presión ejercida sobre las piernas colgadas en los estribos.
  4. La ausencia de una efectiva y sostenida presión por parte de la cabeza fetal sobre el periné, no permite una eficaz y pausada distensión del mismo, con la consecuencia de una necesidad compulsiva de realizar una episiotomía que sería innecesaria.
  5. El carácter de procedimiento de intervención de la posición de litotomía se completa con anestesias peridurales e infusiones de oxitocina rutinarias que agregan dificultades inherentes a esos procedimientos.
Sobre este parámetro de la medicalización se sostienen y afirman otros dos aspectos que caracterizan y ponen valla a la catarata emocional que irrumpe continuamente, uno de ellos es la despersonalización de la parturienta transformada en un "objeto de trabajo", un "campo de trabajo", rendida en su condición de "paciente", acostada inmóvil y obediente a las prescripciones del "personal". En esta condición se somete al "torrente animal" de movimientos y sonidos que pulsan internamente por encontrar cauce en su cuerpo "amordazado". La experiencia de desintegración y pérdida de control resulta intolerable e inmanejable. Un cuerpo-objeto despersonalizado es dócil a la exigencia médica.

La culminación de esta escena encuentra a la mujer pariendo acostada en una cama de partos, dentro de un ámbito de sala operatoria, con las piernas alzadas, flexionadas y sostenidas firmemente abiertas en unos estribos diseñados al efecto. El sexo rasurado, puesto en primer plano frente a los presentes y bien iluminado, frecuentemente rodeada por los cinturones del monitor fetal y la vía de la venoclisis sistemáticamente colocada. La inmovilidad es completa, el acceso a su cuerpo es total, hallándose a disposición para la inspección e intervención continua de los asistentes. Se incrementa la vulnerabiblidad por el fantasma de lo que el otro puede hacer con su cuerpo ya vulnerable.

Esta posición de dependencia que la compulsa a estar en manos de los otros tiene un enorme significado simbólico. Acostada, no alcanza con su mirada a sus genitales y la imposibilidad de movimiento la inhibe de estar conectada con sus impulsos y sensaciones físicas y emocionales. El esfuerzo de parir es una actividad humana que requiere un empeño subjetivo y una necesidad de contacto de los pies con la tierra.

Ella acostada, con los otros de pie frente a ella , está en una posición considerada "más cómoda" para la intervención pero que tiene un claro significado de poder, así, es silenciada la voz de la mujer para elegir la posición de parir.

Un intento de responder a evidencias científicas ha sido el desarrollo de los sillones de parto electrónicos, que con desigual fortuna han circulado por muchas salas de parto pero sin la correspondiente creencia en sus valores y beneficios. Pero debemos advertir que este diseño se transforma eventualmente en un instrumento más que intenta reemplazar el más valioso instrumento para parir que tiene una mujer: su propio cuerpo. En estas sillas de alta tecnología, a la mujer se le priva de la libertad de salir de su posición las veces que desee entre las contracciones y sus parejas se distancian del contacto íntimo necesario. A pesar de las ventajas fisiológicas que ofrece sobre la cama de partos y la litotomía, sigue constituyendo un obstáculo para las mujeres que desearían tener la libertad de cambiar frecuentemente de posiciones entre contracciones, para pujar quizás sentada, arrodillada o en cuclillas, en el piso o en el agua."

Carlos Burgo, Médico obstetra y ginecólogo, autor de Parir con pasión (editado en Argentina)

Miembro Titular de la Asociación Argentina de Ginecología y Obstetricia Psicosomática (AAGOP). Miembro Titular de la Asociación Argentina de Perinatología (ASAPER), Premio de la Fundación E. Koremblit: Retorno al parto natural, 1990, Buenos Aires, Argentina.


Me siento tan identificada con lo que expone el doctor Burgo! así me sentí yo en mi parto, un objeto, una cosa a la que tiraron encima de una cama de parto y ataron para hacer de ella lo que querían, sin voz ni voto. Despersonalizada. No hay palabra que lo defina mejor.

A mis lectoras y amigas, pido perdón si canso con este tema, pero es algo que me cuesta superar, el haber sido maltratada en el momento más maravilloso de mi vida, el nacimiento de mi hija, es algo que no puedo olvidar. No hay nada que hacer, como me dijeron desde una ONG a la que consulté, "ya pasó y no hay nada que puedas hacer". Lo que sí puedo hacer es ayudar a que a ninguna mujer le suceda lo mismo. Y si leyendo lo que escribo desde este humilde espacio, ayudo aunque sea a una sola chica, me sentiría mejor.